Seis policías nacionales y seguridad privada para los nuestros en Sudáfrica

LOS FAMILIARES DE JUGADORES, OBLIGADOS A MOVERSE SIEMPRE EN GRUPO

Los familiares de los jugadores tendrán seguridad privada puesta por la Federación durante toda la estancia en Sudáfrica. La cita que se inicia el viernes no será como el resto de mundiales o eurocopas disputados hasta ahora. El clima de delincuencia que se vive en el país africano, además de otros problemas relacionados con la salud como el alto riesgo de contagio de SIDA, han alejado de manera definitiva a los aficionados de la mayoría de las selecciones de viajar hasta el continente africano para presenciar los partidos de sus equipos. También el precio del primero de los viajes programados que abarcaría el segundo y tercer partido de la fase de grupos (6.500 euros) han frenado las intenciones de muchos de los habituales en estos viajes.

Los que nunca solían fallar en este tipo de citas eran los familiares y amigos de los jugadores. En la Eurocopa de Austria y Suiza, todos los movimientos de la selección llevaban tras de sí una cohorte de unos cien seguidores que tenían algo que ver con los internacionales españoles, imagen que no se va a repetir en Sudáfrica. En esta ocasión, la cifra se reducirá a una mínima expresión, al menos hasta las posibles semifinales.

Las estrictas recomendaciones de los responsables federativos respecto a la seguridad, en las que insistían en la necesidad de acatar al pie de la letra las normas que indicaban la obligatoriedad de hacer cualquier tipo de desplazamiento en grupo y bajo la supervisión de la seguridad puesta por la Federación y la prohibición de hacer cualquier tipo de excursión al margen de lo programado, han llevado a los jugadores a reducir el número de acompañantes. Y es que más de uno de los internacionales españoles han pensado que no estarán tranquilos sabiendo el riesgo que correrán sus familiares 'ahí' fuera.

Tales son las medidas de seguridad que va a poner en marcha la Federación, que ya ha llegado a diferentes acuerdos para cerrar algunos de los bares y restaurantes en la ciudad de Pochestroom para que los jugadores y sus familiares puedan estar tranquilos y sin problema alguno durante los días u horas de descanso que tengan los jugadores de Del Bosque. La libertad de la que gozaron durante la concentración de Neustift en la pasada Eurocopa ya es historia. En Sudáfrica cualquier movimiento de los dueños de La Roja será seguido por la policía local, por miembros de seguridad de la Federación así como por seis policías nacionales que acompañarán desde este viernes al equipo. No habrá movimiento alguno sin vigilancia.

Y es que los dirigentes de la Federación no quieren bajo ningún concepto que su expedición (también incluyen a los periodistas y familiares) pueda sufrur percance alguno como sucedió con la de Portugal, de ahí que la seguridad se haya convertido en asunto prioritario.

Fuente:

http://www.elconfidencial.com/deportes/seguridad-privada-familiares-internacionales-sudafrica-20100610.html